La cesta es en realidad un cartón de cereales. Le he quitado un lateral y el resto lo he forrado con folios hasta que no se viera nada más. Esa fue la primera que hice así, pero luego fui mejorandolas.
En estas dos cestas lo que les puse fue un lazo hecho con tela de organza rosa. La tela de organza es muy
"jodida" porque si se manipula mucho se deshace.
Para no llegar a eso, lo que tenemos que hacer es quemarla un poco por los bordes. Cogemos una vela, la encendemos, y con el lazo recortado nos hacercamos a la llama, sin tocarla ya que nos puede salir la tela entera ardiendo. Sólo con la cercanía del calor notarás cómo la tela se derrite. Hazlo por todos los bordes y cuando termines toca la tela. Verás cómo no se deshilacha como antes. Entonces es el momento de rodear la caja camuflada y hacerle una moña bian fuerte para que no se suelte.
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